Parece ser que la mudanza sigue causando estragos en mí. Me encanta el piso, hoy Miguel (el dueño de la pizzeria que está a 5 puertas de casa y que se está portando con nosotros como un familiar, bueno, él y su mujer Ángela) ha venido a colgarnos las cortinas. Unas cortinas, que por cierto nos ha dado una vecina. Es estupendo, la verdad que sí. Hemos dado con un círculo de gente en el que todo es de todos y todos se ayudan entre sí con mucho amor y respeto. Y aquí estamos, recién llegados a la "comunidad".
Llevo un par de días algo rara. Quizás el comentario de mi padre de hace un par de semanas haya despertado: "a ver si con esta gente te va a pasar como con aquella de Sabadell". No sé, es como si porque la gente te ayuda y es buena contigo tuvieras que estar eternamente agradecido y olvidarte de tus sentimientos y dejar que te mandangueen a su antojo. Entonces de ahí deriva el: "¿realmente, merezco que esta gente se vuelque tanto conmigo? ¿Seré capaz de corresponderles? ¿Aporto yo algo positivo a estas personas?".
Dice Ángela que el tiempo da y quita razones, y nos deja a todos en nuestros lugares respectivos. No sé... qizás a pesar de mi radicalidad de pensamientos y mi forma brusca de expresarme cuando alguien me habla de temas a los que soy sensible... no sea algo tan insoportable de tolerar para los demás.... No quiero decir con éso que defienda mis defectos, de hecho intento suavizarlos, aunque de momento me cueste conseguirlo. Jejej tengo la sensación de que en mi cabeza vuelvo a tener un batibburrillo de sensaciones, emociones, y pensamientos que me hacen que hierva cual olla exprés!
No sé... quiero gente a mi alrededor qe me acepte con lo bueno y lo malo. Y, necesito dejar de pensar en si voy a ser capaz o no de corresponderles.... éso, seguramente, nos lo dirá el tiempo....
1 comentario:
hola desde méxico. te pasoa saludar y a desearte lindo día.
CIAO.
"LA VIDA ES UN GRAN CIRCO, PERO SIN ESPECTADORES"
Publicar un comentario