Como comenté hace una semana y pico, Selva ya tiene once añazos. Así que, ya está jubilada!
Sí, ahora tengo un perro pensionista en casa que en breve me dirá que se va de viaje con el Inserso... Con todo ello, ni que decir tiene, jejej que todavía no he encontrado el equilibrio entre el "no trabajar bajo ningún concepto", que creo que para el perro tampoco es bueno, y "trabajar algunas horas sin estrés", que quizás, siempre y cuando Selva se encuentre estupenda, sería lo recomendable para ir bajando el ritmo de actividad de forma paulatina... sin que eso suponga un cambio radical para ella ni para mi.
Tengo que reconocer que tengo "perrodependencia" y que volver a hacer mi vida normal con el bastón se me hace un mundo.. y es algo raro... porque sé que puedo, sé que debo... pero a la hora de la verdad me dan miles de inseguridades...
El relevo de Selva está solicitado... otra contradicción... me hace muchísima ilusión tener otro perro en casa... pero al pensar en los motivos que me llevan a esa decisión... me da pena. Voy a por otro perro porque Selva ya está mayor y no debe seguir trabajando con la intensidad de siempre.
A días se lleva mejor... a días se lleva peor... pero en fin.... haremos lo máximo que podamos... para que en ningún caso.. acabe reprochándome nada.
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