No tengo palabras para expresar lo que he sentido al ver en las noticias las declaraciones del padre de Mari Luz. Me ha sorprendido su entereza. Aunque ni que decir tiene, que más me ha sorprendido la actitud del presunto culpable. ¿Cómo puede hacerse eso con una niña de cinco años?
3 comentarios:
Ese asqueroso personaje, al que no me atrevo a llamar hombre, por no agruparle dentro de mi especie, sólo merece que le encierren de por vida, desnudo, en una carcel llena de antiguos presos desesperados.
Pocos veces mi odio se convierte en algo tan visceral, pero en estos casos se manifiesta de una manera que me da miedo a mi mismo. Pero no me importa, este ser debe pudrirse, sólo, en algún lugar abandonado del planeta.
ufff Samuel, gracias por ponerle cara y ojos a ese odio.... yo pienso lo mismo.... aunque no descartaría algo de tortura.... no hay derecho a que haya tanto cabronazo (no encuentro palabra o insulto para denominarlo) en el mundo.
Yo también me he sorprendido por la serenidad y entereza del padre. Mi solidaridad a este hombre que ha sufrido tan penosa pérdida. Ojalá ningún otro padre pase por ese trance.
En cuanto al asesino (por muy presunto que sea todavía) creo que es un tipo imposible de rehabilitar, sea un enfermo, sea un pervertido, sea lo que sea. Ha repetido tantas veces sus fechorías que me pregunto por qúe está en la calle, cerca de donde viven los niños.
Y otra cosa: ¿qué hacen esa hermana y esa mujer ejerciendo de cómplices de este cabronazo? ¿Cómo han podido ayudarle a tapar el asesinato de la criatura? No me cabe en la cabeza tanta maldad.
Publicar un comentario